Al acabar el día, parece un ejercicio sano reflexionar sobre lo que hemos vivido, ser consciente de todo lo bueno logrado y agradecer todo lo que hemos disfrutado.
Y eso mismo, al cerrar un año, se ha convertido en un ejercicio necesario no solo para las personas, sino también para las organizaciones.
Desde ENCAMINA hemos hecho ese ejercicio fijándonos, sobre todo, en esos otros resultados que tanto nos gusta aportar, más allá de lo operativo.