Cómo no romper los límites, cómo crear una buena arquitectura y cómo hacer un buen mantenimiento

Avances tecnológicos para seguir evolucionando en un mundo conectado

Hace unas semanas tuve el placer de escribir un artículo de opinión para el diario Levante-EMV sobre todos los avances tecnológicos que nos deparará este 2020. Las reflexiones de aquel artículo las comparto con vosotros desde este blog, con más detalle y profundizando en algunos aspectos que me parecen especialmente interesantes 🙂

Hoy en día la tecnología está en continua evolución, cada día, cada semana o cada mes se avanza en algún tema y, por este motivo, es complicado hablar de tendencias o intentar pensar que avances vamos a tener el próximo año. Con este artículo, vamos a intentar dar nuestra visión de aquellos temas que deberían de estar en nuestro radar personal o empresarial, avances que deberían permitirnos seguir evolucionando como mundo conectado.

5G

Entre el conflicto con Huawei, que parece que quiere dominar el mundo de las tecnologías, las operadoras de telefonía, que son más operadores de internet porque poco usamos hoy en día la voz, y los gobiernos, que tienen muchas dificultades para evolucionar al ritmo que lo hacemos los tecnólogos, no tenemos claro cómo va a evolucionar la quinta generación del internet móvil, 5G. Si bien, parece que Huawei tiene la tecnología más avanzada, los gobiernos, con USA a la cabeza, no terminan de confiar en la tecnológica china para ceder nuestras redes. La desconfianza en el mal uso de la información personal, empresarial o gubernamental que se puede obtener de estas redes puede llevarnos a un parón en la evolución que parecía ser una revolución en el día a día de las conectividades móviles.

Los ejemplos de uso del 5G parecen llevarnos a un mundo mejor conectado, gracias a la velocidad de la red y la poca latencia que ofrece esta tecnología, donde podemos realizar cualquier actividad remota. Por ejemplo, operar un brazo robótico de una fábrica sin ninguna dificultad desde cualquier parte del mundo.

Parece ser que el 2020 será el año del arranque del 5G. Tened en cuenta que tienen que llegar dispositivos que soporten estas redes, además del despliegue de la propia red que no termina de avanzar por la desconfianza en Huawei.

Conducción autónoma

Una investigación de una consultora muy relevante sobre la adopción de vehículos de conducción autónomos predice que en Estados Unidos se podría reducir el número de accidentes viales en un 90 por ciento, lo que supondría un ahorro de 190 mil millones de dólares en daños y gastos de salud, así como innumerables vidas cada año. ¿No os parece que deberíamos innovar en esta área?

 

La realidad de la conducción autónoma es muy diferente, varía según el prisma desde el que se mire. Para empresas con filosofía de innovación, como Tesla, Alphabet, Waymo, los coches autónomos son una realidad y están listos para salir al mercado. Sin embargo, empresas más “clásicas” que analizan todos los factores, tecnológicos y no tecnológicos, como Gartner, comentan que los problemas de decisiones complejas no están resueltos por la inteligencia artificial. Por ejemplo, se plantea esta casuística ante un posible atropello: si el coche autónomo puede o debe decidir entre salvar al peatón o al conductor del vehículo.

Aunque la tecnología esté preparada, el principal escollo es de legislación. ¿Tenemos leyes adecuadas la conducción autónoma? ¿Será posible que vehículos conducidos por personas puedan interactuar con vehículos conducidos por una inteligencia artificial? Desde mi punto de vista, la mezcla de los conductores no es buena. Las personas no somos predecibles y menos conduciendo, y muchos de los accidentes ocurren cuando nos saltamos las normas, algo que una inteligencia artificial no sabe predecir. Esto, prodría provocar justo el efecto contrario, que se provocaran más accidentes de los habituales. Aún así, deberíamos tener leyes que permitan, en ciertos escenarios como las autopistas, la conducción autónoma.

Las grandes marcas ya contemplan este tipo de vehículos, aunque no sean totalmente autónomos, y no nos extrañemos si en el 2020 empezamos a ver conductores sin las manos en el volante.

Computación cuántica

Todas las grandes empresas de tecnología están trabajando para ganar lo que se llama la “supremacía cuántica”. Microsoft, Google, IBM, todas están realizando grandes inversiones en esta área de la tecnología. Lástima que no se pongan de acuerdo para avanzar en la misma línea, ya que parece que las arquitecturas de cada una de ellas no son compatibles.

La computación cuántica es la próxima generación de la computación en la nube, lo que parece que nos permitirá dar otro gran salto en la inteligencia artificial. Los primeros pasos de esta tecnología se dieron en los años 70, definiendo algoritmos de aprendizaje de máquina que eran capaces de predecir ciertos aspectos de nuestros datos. Hoy, gracias a la nube se cuenta con suficiente computación para realizar estos cálculos complejos y por tanto vemos infinidad de avances.

El 2020 puede ser el año de esta tecnología. Google tiene resuelto su modelo de computación cuántica, Microsoft está ofreciendo herramientas de desarrollo para estas arquitecturas y, de forma privada, acceso a ordenadores cuánticos en la nube. Quedaos con una palabra que se oirá mucho este año: qubit. Aunque no es una tecnología que disfrutemos directamente como personas, la inteligencia artificial dará otro gran salto y romperá las fronteras actuales entre una inteligencia artificial y la consciencia humana, ¿serán capaces de pensar como lo hacemos las personas?

Inteligencia Artificial

¿Son realmente inteligentes las máquinas? Esta es la pregunta que hago cuando alguien interactúa con alguno de los diferentes tipos de lo que llamamos inteligencia artificial. Os pongo un ejemplo, intentemos mantener una conversación fluida con Alexa, ¿a qué no es posible? Lo que el mercado entiende por “inteligencia artificial» no es lo que podemos entender nosotros como seres humanos. Alexa está preparada para realizar actividades específicas como un buen asistente, pero no es capaz de mantener un contexto de la conversación. Si le preguntamos “¿qué temperatura hará en Tenerife mañana?” nos dará una respuesta muy válida, pero si a continuación le preguntamos “¿Me recomiendas llevar un paraguas?” el contexto anterior que se centraba en una ciudad concreta lo ha perdido y no sabrá que contestar o no contestará nada relativo a esa ciudad.

Alexa contesta a nuestras preguntas utilizando algoritmos de inteligencia artificial. Algoritmos que le permiten reconocer el habla y transformarla en texto, que le permiten procesar el texto y reconocer la intención de la pregunta y sus entidades relevantes, etc. Todo esto sin ningún tipo de libre albedrío que le permita, de forma inteligente (o lo que nosotros entendemos por inteligencia), encontrar la respuesta adecuada en su cerebro o base de datos.

¿Llegará en el 2020 una inteligencia artificial consciente de sus actos? Todo es posible. Los avances son cada vez más habituales y otras tecnologías, como la computación cuántica, permitirán acelerar aún más estos avances. Hace unos años, un software, basado en algoritmos de inteligencia artificial, fue capaz de ganar al campeón del mundo de “GO”, uno de los juegos estratégicos de mesa más complejos del mundo. Eso sí, con mucho entrenamiento y, como ya os estaba intentando explicar, resolviendo una tarea compleja en lugar de una persona. Lo que sí podemos tener claro es que la inteligencia artificial es una realidad en las empresas y en el 2020 llegarán nuevas capacidades de democratización.

 

Blockchain

Blockchain es tendencia tecnológica todos los años, ¿será que no termina de arrancar? Los usos de esta tecnología son múltiples y posiblemente ya la estamos usando, aunque no seamos conscientes de ello. Blockchain no es simplemente las monedas virtuales como Bitcoin, es mucho más. Con Blockchain se asegura que los datos de una cadena de suministro sean inmutables, por ejemplo, nos permite garantizar la trazabilidad de los productos perecederos que llegan a los consumidores, y a la vez conocer los procesos y transportes por los que ha pasado un producto, y además confiar en que estos datos no hayan sido manipulados por ningún proveedor, sacándole partido a unos de los puntos claves de esta tecnología, la confianza en los datos.

Para confiar en esta tecnología, de nuevo necesitamos que los organismos públicos participen de ella. Creo que no sirve de nada que una empresa se cree su propia red de Blockchain. Esta monogamia no ofrece confianza a los usuarios de la red. Necesitan empresas que participen como nodos de la red para dotar a la misma de transparencia y que, cuando un usuario envíe datos a la misma, la inmutabilidad del registro esté garantizada por todos los integrantes que participan en ella.

¿Será el 2020 el año, otra vez de Blockchain? Parece que existe una posibilidad de democratizar esta tecnología, aunque sea en su formato más habitual, la moneda. Facebook está trabajando en su propia moneda virtual, basada en Blockchain, y, conociendo el potencial de la red social, tiene muchas posibilidades de éxito, tanto que los grandes monopolios de los sistemas de pago electrónico, como VISA o Mastercard, no terminan de querer darle su apoyo. Lo veremos, aunque sólo sea por toda la publicidad que nos hará llegar Facebook a nuestras redes.

Un año de convergencia

El 2020 va a ser el año de la convergencia de la tecnología, un año donde se alinearán ciertos avances para, lo que parece, un gran salto en nuestro día a día. El 5G y la computación cuántica dotarán de más y mejores capacidades a la inteligencia artificial, lo que permitirá avanzar en la conducción autónoma o en las redes de Blockchain. Si todo esto converge, se conseguirán grandes avances, similares a los que  iniciaron la era de la computación en la nube o de los smartphones. Tecnologías que son un estándar, que usamos todos los días y que se han integrado perfectamente en nuestras vidas.

mm

Sobre Alberto Diaz Martin

Alberto Diaz cuenta con más de 15 años de experiencia en la Industria IT, todos ellos trabajando con tecnologías Microsoft. Actualmente, es Chief Technology Innovation Officer en ENCAMINA, liderando el desarrollo de software con tecnología Microsoft, y miembro del equipo de Dirección. Para la comunidad, trabaja como organizador y speaker de las conferencias más relevantes del mundo Microsoft en España, en las cuales es uno de los referentes en SharePoint, Office 365 y Azure. Autor de diversos libros y artículos en revistas profesionales y blogs, en 2013 empezó a formar parte del equipo de Dirección de CompartiMOSS, una revista digital sobre tecnologías Microsoft. Desde 2011 ha sido nombrado Microsoft MVP, reconocimiento que ha renovado por séptimo año consecutivo. Se define como un geek, amante de los smartphones y desarrollador. Fundador de TenerifeDev (www.tenerifedev.com), un grupo de usuarios de .NET en Tenerife, y coordinador de SUGES (Grupo de Usuarios de SharePoint de España, www.suges.es)
Esta entrada ha sido publicada en Cloud. Enlace permanente.
ENCAMINA, piensa en colores