Siempre me ha parecido una suerte el ser joven y tener una vocación muy clara, porque eso marca constantemente un camino lleno de motivación y sentido. Y es que cualquier ser humano, y por ende cualquier organización de personas, necesita tener claro el sentido de su existencia.
ENCAMINA, acaba de cumplir 18 años y a nuestra mayoría de edad buscamos desentrañar nuestro propósito en el mundo.
El PROPÓSITO DE ENCAMINA
Desde las lecciones del marketing y de management, si tuviera que formular el propósito de ENCAMINA con 18 años de experiencia a la espalda y una misión y visión que ha evolucionado de forma convergente todo este tiempo, sería algo así como:
Inspirar a nuestro mundo en la forma positiva, generosa y creativa de
impulsar la productividad y la innovación para el negocio de nuestros clientes,
mediante la tecnología más avanzada, y el talento más apasionado y comprometido.
Este propósito implica una ambición por el liderazgo en nuestro ámbito (nacional) y por tanto estrechar al máximo nuestra especialización (tecnología Microsoft), un marcado estilo de actuación (espíritu “Piensa en Colores”), una gran coherencia con los valores corporativos (pasión, compromiso, flexibilidad, iniciativa, creatividad, equipo) y un toque trascendental al aspirar a ser un referente y hacer historia en nuestro mundo.
Y todo eso mientras bregamos con problemas terrenales y desafortunados acompañantes de viaje, trabajamos en proyectos no tan divertidos y logramos a duras penas que las cuentas salgan como para poder seguir invirtiendo en innovación y talento…
EL SUEÑO DESDE LA REALIDAD
Sin embargo, si la versión más creíble de tu sueño es aquella que trasciende a ti mismo, y es el equipo de facto el que lo interpreta, lo reformula con sus propias palabras y lo hace suyo desde la realidad del día a día, entonces el sueño ENCAMINA ha resultado ser el de:
Crecer personal y profesionalmente, ayudar a otros, transformar a nuestros clientes y crear valor para el mundo.
(Fdo.: el equipo de @ENCAMINA, 06/05/2018)
LA VIABILIDAD DEL SUEÑO
Y después de 18 años de experiencia y todavía en la búsqueda del sueño, si algo me hace creer que es posible seguir adelante y llegar más lejos, es la confianza en el valor y potencial de las personas.
Si logramos trabajar en equipo, desde la mejor versión de cada uno de nosotros, no importa el tamaño, ni el lugar, ni el punto de partida, lograr cualquier sueño es posible.
Y si alguien lo duda, que mire al firmamento en ascensión recta 12h 54m 01.63s con declinación +55º 57’ 35.4’’ y allí estará la estrella ENCAMINA para recordárselo (nº registro HD3-B8T-SBS-UOB).
¡Suscríbete a nuestras RRSS!
