Hoy, que ya quedaron atrás esos hitos y sus miedos asociados, podemos mirar al pasado con orgullo de, al menos, haber llegado hasta aquí, con la que está cayendo, y con la que ha caído en el camino. Nadie nos garantiza, no ya que sobrevivamos 10 años más, ni siquiera 10 meses, pero miramos al futuro con ilusión, confiados en que estamos haciendo lo correcto para llegar a «vivir» otros 10 años al menos.
Cuando miramos hacía atrás nos vienen a la cabeza los errores cometidos, de los cuales tanto hemos aprendido, pero también los proyectos ilusionantes y los muchos profesionales con los que los hemos compartido y disfrutado. Hemos visto aparecer y desparecer clientes, ir y venir tecnologías y han pasado por nuestras oficinas un buen número de profesionales que han formado parte de nuestra familia durante más o menos tiempo.
Todas estas personas nos han acompañado en este camino: clientes, socios, empleados, proveedores, asociaciones, administraciones. Unos han hecho un trecho largo del camino, y otros apenas unos pasos, pero todos han contruibuido a que ENCAMINA sea hoy lo que es, y a todos ellos hemos de agradecerles su aportación, cada uno en su medida, todos han ayudado a construir lo que somos hoy. ¡Gracias por ello!