Cloud

¿Realmente un Cloud público es más caro que uno privado?

He tenido el placer de participar en un debate sobre Cloud en ncora.tv y, como era de esperar, salió la gran pregunta ¿el Cloud público es más barato o más caro que uno privado?

Primero, me gustaría poder definir que es esto de Cloud Público o Cloud Privado, no sea que no tengamos claros los conceptos.

Conocemos como Cloud Computing o Nube al modelo de prestación de servicios de tecnología que permite al usuario acceder a un catálogo de servicios estandarizados y responder con ellos a las necesidades de su negocio, de forma flexible y adaptativa, en caso de demandas no previsibles o de picos de trabajo, pagando únicamente por el consumo efectuado.

Recapacitando sobre la definición anterior de la Wikipedia, un Cloud Público tiene que tener las capacidades definidas en el Cloud Computing y además de estar disponible para que cualquier persona o empresa pueda contratar y hacer uso de la misma. Por ejemplo:

  • Hotmail como Software as a Service
  • Office 365 también  como Software as a Service
  • Microsoft Azure como plataforma donde podemos elegir servicios Infrastructure as a Service o Platform as a Service

Siguiendo con los formalismos, un Cloud Privado tiene que cumplir, también, con la definición de Cloud Computing pero sin el carácter público, manteniendo los servicios gestionados por la propia empresa que consume el Cloud.

Sin entrar en el debate de  si existen estos Cloud Privados, el precio de un Cloud Público incluye gastos derivados del licenciamiento,  la administración, soporte y mantenimiento de la infraestructura, además de lo básico hoy en día como aire acondicionado, luz, seguridad física, etc. Si comparamos el precio de un servicio en Cloud público con Cloud privado, es importante tener en cuenta estos factores que, normalmente, no se repercuten en el modelo privado.

Cuando acompañamos a una empresa por el camino de la nube pública, siempre hacemos un primer ejercicio de optimización de recursos. Básicamente intentamos identificar qué servicios tienen que estar activos, cuándo tienen que estar disponibles y con qué recursos mínimos. Esto nos llevará a localizar aplicaciones donde podemos realizar un ahorro de costes, por ejemplo, apagando el servicio de contabilidad por las noches o los fines de semana, lo que implica pagar menos porque consumimos menos recursos.

Casos prácticos

En una nueva privada, hemos invertido en una capacidad finita de recursos, normalmente pensando en el caso más extremo de necesidades, por ejemplo, necesitamos 16Gb de RAM para que los 20 usuarios del departamento financiero puedan trabajar, eso significa que tenemos que comprar esa capacidad y tenerla disponible aunque no hayan usuarios conectados.

De acuerdo, al igual que en el Cloud Público, puedo parar el servicio y aprovechar esos recursos disponibles para otros servicios que los necesiten… pero ésto es un encaje de bolillos bastante complejo y no siempre es posible. Además, ¿que pasa cuando necesito esos recursos pero no puedo disponer de ellos porque se están reaprovechando en otro servicio? También, gracias a la virtualización, es posible una distribución (más o menos dinámica) de los recursos disponibles entre todos mis servicios, pero básicamente tenemos que hacer una primera inversión en hardware pensando en soportar el modelo más extremo de nuestras aplicaciones, algo que en un Cloud Público no es necesario porque disponemos del maravilloso pago por uso.

El siguiente paso para mejorar los costes en un Cloud Público es modernizar nuestro servicio o aplicación planteando una arquitectura de ejecución basada en PaaS, que nos permita tener menos necesidades de administración para centrarnos en lo que realmente es importante: nuestro código que ejecuta un modelo de negocio y los datos asociados a este.

¿Podemos implementar un arquitectura PaaS en un Cloud privado? ¿Tiene sentido?

Aunque no es fácil, nuestra recomendación es caminar hacia el segundo paso, implementar una arquitectura cloud y no mover nuestras aplicaciones tal cual están nuestro datacenter, siempre que sea posible. Aún así, para cualquiera de los casos, tenemos que ser capaces de definir esos patrones que nos permitan usar los recursos cuando sean necesarios.

¿Es el cloud público más caro? Pues, aunque con un simple cálculo no se vea, seguro que en la mayoría de los casos es viable conseguirlo. La clave es NO tratar el Cloud como un hosting porque no vamos a conseguir el objetivo de mejorar y/o abaratar costes.

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Publicado por
Alberto Diaz Martin

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