reflexiones

La hucha de la vergüenza (y la mejora)

Tenemos en ENCAMINA desde hace unos días, varias huchas que acogen las multas que nos ponemos cuando alguien del equipo habla mal de alguien (o habla despectivamente, en general).

Y es que los juicios negativos sobre una persona nos traicionan porque nos predisponen a una relación condenada a la distancia en el futuro. Y una empresa de servicios, orientada al cliente, y que Piensa en Colores (desde el compromiso y la pasión), no puede permitirse que en las reuniones, mails, teams, pasillos o en la barra de un bar, se hable mal de clientes, colaboradores o de quién sea. Crear la tan necesaria empatía, cercanía, buen rollo, flow, es justo lo contrario de eso.

Las huchas nos ayudan a mejorar mucho, porque nos hacen más conscientes de nuestras palabras y juicios.

Nosotros hemos venido a ENCAMINA a construir, no a batallar

Nuestras palabras influyen poderosamente en cuantos nos rodean y en nosotros mismos. Mucho más de lo que podemos ser conscientes. Así pues, debemos ser muy cuidadosos con lo que sembramos, si queremos cultivar relaciones satisfactorias, una mente sana y optimista, e incluso un mundo mejor.

Lo mejor para nuestra salud personal y profesional es quitarse de encima malos pensamientos (y palabras negativas)  y ser lo más empáticos y positivos que podamos con cuantos nos rodean.

Erramos y aprendemos

Y pese a todo, somos humanos y alguna vez podemos tener un desliz y equivocarnos...Pues para eso tenemos la hucha: para pagar nuestras culpas y sobre todo para mejorar.

PD: las huchas ya tienen ONG asignada para fin de año. Espero no recoger mucho dinero por esta vía 🙂

 

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Publicado por
Hugo de Juan

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